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sábado, diciembre 19, 2009

chanchos culiaos haciendo su pega y elucubrando 

Reservadas diligencias para establecer vínculos estratégicos con autodenominados anarquistas:
Los nexos del lautarista Villarroel con los "okupas" indagados por bombazos

El repatriado ex subversivo fundó un colectivo de corte anarquista y anticarcelario a inicios de los 90 cuando cumplía pena por el atentado al intendente Luis Pareto.

P. Lezaeta, O. Saavedra e I. Fredes
No sólo algunas de las cartas incautadas la semana pasada en casas "okupa" por la policía son las que ligan al lautarista Marcelo Villarroel, expulsado desde Argentina, con integrantes del lumpen autodenominado anarquista.

Así lo indicaron fuentes vinculadas al denominado "caso bombas", que revelaron que Villarroel, uno de los buscados tras el asalto al banco Security en 2007 en el cual murió el cabo de Carabineros Luis Moyano, ha mantenido un rol como uno de los tantos regentes e instigadores de las acciones violentistas que tienen en la mira de la policía a los "okupas" anarquistas.

Es en esta línea que los expertos policiales presumen que parte del material de lectura subversiva de elaboración interna de estas comunidades sin orgánica o liderazgos, resume ideas extremistas de Villarroel.

De hecho, apuntan fuentes policiales, Villarroel desde 2004 -cuando logró su libertad condicional, tras cumplir condena desde 1992 por el atentado al intendente Luis Pareto- frecuentaba la casa "okupa" Sacco y Vanzetti, una de las viviendas que allanó la policía en los operativos del pasado viernes 11 del presente.

"Kamina Libre"

Previamente, cuando estuvo preso, Villarroel fundó el colectivo "Kamina Libre", una agrupación anticarcelaria y antisistémica al igual que la de los anarquistas "okupa" de la actualidad.

Por ello, el subversivo se convirtió en un referente, situación que quedó en evidencia en portales de internet sostenidos por seguidores del anarquismo. En ellos, periódicamente, se daba cuenta de cómo estaban Villarroel y su cómplice Freddy Fuentevilla en la cárcel de Neuquén, Argentina, donde fueron ingresados tras una pelea con los guardias de un pub en marzo del año pasado.

Incluso, algunas grabaciones realizadas en el citado penal fueron subidas a esos sitios. Allí se podían ver entrevistas a ambos lautaristas durante horarios de visita.

Dichas páginas web aún son usadas para organizar actividades de agitación y propaganda de los autodenominados anarquistas. "Colaboradores" anónimos publican textos sobre la asociación del "capitalismo" y "la prensa burguesa", que operaría en contra de su movimiento que normalmente envía a sus seguidores mensajes tales como "ataca, incendia, destruye".

Los administradores de dichos portales de internet también están bajo la lupa de las policías, dado que también en sus publicaciones se llama a la agitación en la zona de conflicto mapuche.

Respecto de los vínculos de lautaristas con los grupos anarquistas, el fiscal nacional, Sabas Chahuán, fue ayer cauto, pero aseguró que es un tema "que se investigará".

El denominado caso bombas (más de 70 han sido detonadas desde 2005) es indagado preferentemente por cerca de una veintena de policías especializados en inteligencia y en organizaciones criminales.

Pruebas policiales apuntan a tres responsables por bombazos
Los resultados de peritajes a los elementos recientemente incautados en casas "okupa", sumados a testimonios, registros fotográficos y escuchas telefónicas, han permitido a Carabineros determinar, hasta el momento, las identidades de tres de los presuntos autores de bombazos en la capital. Por ahora, esos nombres se mantienen bajo estricto secreto.

Fuentes policiales aseguran que se está trabajando en afianzar lo más firmemente posible dichas evidencias con el fin de, posteriormente, concretar detenciones. Para lograr pruebas sólidas, añaden, se han empleado herramientas propias de las investigaciones por narcotráfico. De ahí que se hayan realizado las citadas escuchas telefónicas y seguimientos. En algunas de las interceptaciones, como la que permitió evitar un atentado explosivo contra la Primera Comisaría en septiembre de 2008 -hecho que finalmente ocurrió en la Tercera Comisaría-, la policía también habría captado conversaciones cuyo objetivo ha sido organizar improvisadas revueltas.

A todo lo anterior se suman escritos y documentos electrónicos que confirmarían posibles nexos entre bombazos y "okupas" autodenominados anarquistas.

Entre tanto, el fiscal nacional, Sabas Chahuán, reiteró ayer que desde el punto de vista de la Fiscalía no ha habido demora en estas investigaciones sino que, por el contrario, una dedicación constante.

"Es cierto que no han dado resultado en el corto plazo, pero hay avances importantes", señaló, sin ahondar en mayores detalles.

"Son investigaciones complejas que llevan un tiempo. Recordemos que en países desarrollados la desarticulación de grupos anarquistas o de índole terrorista que ponen artefactos explosivos ha durado hasta 25 años", comentó.

Chahuán subrayó que no se quiere llegar a eso, pero puntualizó que la Fiscalía sigue trabajando arduamente. "No corresponde dar plazos y se trabaja coordinadamente con las policías y el gobierno", añadió.

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