martes, febrero 08, 2022
Last Poets y los Pseudopillos: música sin instrumentos musicales
Muchos creen que, sin un instrumento musical adecuado, ojalá de marca , con buenos amplificadores y pedales de efectos y haciendo "upgrades" cada cierto tiempo, no se puede hacer música.
Y tienen razón, pero sólo parcialmente:
ellos no podrían hacer música sin toda esa parafernalia, lo cual es bastante triste,
pero totalmente coherente con el largo proceso de mercantilización del sonido
que se vive hace décadas.
Desmintiendo estos fetichismos
tan arraigados podemos recordar y apreciar a los gloriosos Last Poets, formación
norteamericana que en cierto modo inventó el rap, cuando desde un taller de
poesía en la cárcel pasaron a inventar temas vocalizados con un discreto
acompañamiento de percusión.
“Los negros le tienen miedo a la
revolución” es claramente el mayor hit de su primer álbum, de 1970, pero todo
el disco es una obra maestra de poesía urbana y que sigue los ritmos
respiratorio y circulatorio de los poetas que pululan por el metro y los suburbios
rimando verdades que impactan más que varios libros escritos desde la seguridad
aislacionista de los escritores de escritorio.
Por cantar en inglés recomendaría
leer con texto en mano. Sino sería el equivalente de escuchar a Evaristo Páramos
o Víctor Jara cantando en japonés.
Después de ese notable álbum debut,
hicieron otro que incluso se podría considerar que lo supera en calidad y
poder: “Esto es una locura” (1971). Hasta John Coltrane hace aparición en medio de
las rimas, en un tema que después fue versionado o más bien citado desde Jamaica
por el gran poeta del dub reggae Big Youth, en su tema “Jim Screechie”.
Otros que no se hicieron atado
por no tener más instrumentos que la percusión de palma fue la “banda”
Proto-Prisioneros conocida como Los Pseudopillos.
El segundo álbum recopilatorio “Extremista!”
es una genialidad de principio a fin, y comenzando por su portada plagiara del
Sandinista! De los Clash. Llega a dar envidia tanta creatividad y al escucharlo
con audiófonos anoche en la calle no pude evitar las carcajadas en varias ocasiones,
motivadas tanto por la lírica en sí misma, como por las voces que utilizaban
estos adolescentes, que llegan en momentos a oírse tan delirantes como las de
los Residents.
“Mucha gente creía que yo era
socialista…” Jajajaja. Insuperable. Además, es posible apreciar el acento chileno tal cual era antes de los 80, por ejemplo la pronunciación de la "ch" como "shhh". Eso cambió durante la década del ochenta, donde además se aprobó la Ley Antiterrorista (antes de eso se hablaba de "extremista" nomás).
Por si se les hace poco, escuchan
además el primer álbum recopilatorio: “Let it Pillo”.
Estas grabaciones datan de 1980.
Según informa su bandcamp:
Entre 1980 y
1982, Los Pseudopillos, grabaron más de un centenar de canciones. Jorge
González, Claudio Narea, Álvaro Beltrán y Rodrigo Beltrán, sin saber tocar
instrumentos musicales crearon divertidas canciones, algunas de las cuales
presentamos aquí.
Antes de Los
Vinchukas y mucho antes de ser conocidos como Los Prisioneros, en San Miguel ya
sonaban LOS PSEUDOPILLOS.
¡Qué sigan sonando!
Etiquetas: dub, hip hop, nada, punk rock, rock (no punk)